¿Sabías que el paso del tiempo puede extinguir la responsabilidad penal por un delito? En el Derecho Penal español existe el principio de prescripción, por el cual, transcurrido un determinado plazo sin que se persiga judicialmente un hecho delictivo, el delito deja de ser perseguible.
Este mecanismo busca equilibrar el derecho a la persecución penal con la seguridad jurídica del ciudadano. En este artículo te explicamos qué es la prescripción, qué plazos marca la ley y en qué casos puede interrumpirse.
¿Qué significa que un delito ha prescrito?
Prescribir un delito significa que ha transcurrido el plazo legal máximo para que el Estado lo persiga penalmente. Una vez prescrito, ya no se puede investigar, juzgar ni condenar a nadie por ese hecho, aunque existan pruebas.
Es una causa de extinción de la responsabilidad penal, regulada en el artículo 130 del Código Penal, junto a otras como el fallecimiento del reo o el cumplimiento de la pena.
¿Qué determina el plazo de prescripción?
El plazo depende de la gravedad del delito y de la pena máxima prevista para él, según el artículo 131 del Código Penal. Los principales plazos son:
- 20 años: para delitos con pena máxima igual o superior a 15 años (por ejemplo, homicidio, asesinato, violación agravada).
- 15 años: si la pena máxima es entre 10 y 15 años.
- 10 años: si la pena máxima es entre 5 y 10 años.
- 5 años: si la pena es inferior a 5 años.
- 1 año: para delitos leves (antes faltas), como injurias o hurtos menores.
¿Desde cuándo empieza a contar el plazo?
El cómputo del plazo se inicia, por norma general, desde el día en que se cometió el delito.
No obstante, existen excepciones:
- En delitos continuados o permanentes, como el maltrato habitual o el acoso, el plazo comienza cuando cesa la conducta.
- En delitos contra menores o personas con discapacidad, el plazo puede empezar cuando la víctima alcanza la mayoría de edad.
¿Se puede interrumpir la prescripción?
Sí. El plazo de prescripción puede interrumpirse, lo que significa que deja de correr desde el momento en que:
- Se presenta una denuncia o querella ante la autoridad competente.
- El Ministerio Fiscal inicia diligencias de investigación.
- Se dicta un auto de procedimiento o apertura de juicio oral.
Una vez interrumpida, la prescripción vuelve a empezar a contar desde cero, salvo que el procedimiento judicial quede inactivo durante más de lo permitido legalmente (art. 132 CP).
¿Prescriben todos los delitos?
No. Algunos delitos no prescriben nunca. Son los más graves y están expresamente establecidos por la ley:
- Delitos de terrorismo con resultado de muerte.
- Genocidio y crímenes de lesa humanidad.
- Delitos de guerra graves.
- Delitos de tortura o contra la integridad moral cometidos por autoridades.
- Algunos delitos de corrupción en el ejercicio de funciones públicas (si no han prescrito al cesar en el cargo).
Además, los delitos sexuales contra menores tienen plazos especiales de prescripción mucho más largos, y empiezan a contar desde que la víctima cumple 35 años (según la Ley Orgánica 1/2023 de protección a la infancia).
¿Cómo puede ayudarte Granda Abogados?
En Granda Abogados, analizamos si un delito está prescrito o si aún puede perseguirse judicialmente. Es un punto clave tanto para la defensa penal del investigado, como para saber si una víctima puede interponer una denuncia con validez jurídica.
Ofrecemos:
- Estudio detallado del caso y cálculo de prescripción.
- Alegación de prescripción como causa de archivo.
- Defensa en procedimientos iniciados fuera de plazo.
- Asistencia legal integral en todas las fases del proceso penal.
El paso del tiempo puede jugar a favor de la defensa o cerrar el camino a la víctima. Conocer cuándo prescribe un delito es clave para proteger derechos, actuar a tiempo o evitar errores procesales.
Si tienes dudas sobre un caso concreto o necesitas saber si puedes actuar legalmente, en Granda Abogados te ayudamos a interpretar tu situación con rigor penal y claridad jurídica.