Si una pareja se da cuenta de que tiene diferencias y no parecen tener solución, pueden tomar la decisión de que lo más beneficioso es poner fin de forma definitiva con su relación, le recomendamos que acuda a un bufete de Abogados especializados en esta clase de casos.
En el caso de que los dos miembros de la pareja están de acuerdo tanto en la decisión de poner fin a la relación como en las decisiones que deberán tomar, éste será un divorcio de mutuo acuerdo, más rápido y menos costoso que los divorcios contenciosos, gracias a que no hay desacuerdos entre la pareja.
Los dos integrantes de la pareja deberán tomar decisiones y conseguir el acuerdo en diversos temas, como los que tienen que ver con el futuro de sus vástagos, la guarda y la custodia y, para el progenitor que no obtenga la custodia, dejar claro las visitas y la pensión por alimentos.
Asimismo habrá que liquidar el régimen económico matrimonial y hacer una distribución de los bienes comunes de la forma más adecuada . Si no existen riñas entre la pareja, será un proceso de rápida resolución, pese a que las decisiones son trascendentes.
Los temas acordados en este tipo de divorcio irán reflejados en el convenio regulador, que estipulará las reglas en las que se basará la siguiente fase de la relación entre los cónyuges y con sus niños menores después del divorcio. Si se acatan, no habrá ningún problema posteriormente.
El convenio regulador se presentará junto a la correspondiente demanda de divorcio ante un juez y después de comprobar la voluntad de ambos integrantes de la pareja, se procederá a su ratificación.
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